"Las declaraciones del Papa fueron muy difusas" Jhon Botia Miranda, pastor y activista LGTBI
Actualizado: 15 nov 2020
Por Alex Trujillo Giraldo//
El reconocido pastor metodista y activista LGBTI Jhon Botia Miranda, nos compartió en un diálogo su experiencia en la vocación sacerdotal y su postura frente a las recientes afirmaciones del Papa Francisco. Alex Trujillo: ¿Cómo llega Jhon a la vocación sacerdotal?
Jhon Botia Miranda: Yo llegué al servicio ministerial a inicios del año 2017, cuando estaba asistiendo a la Iglesia Metodista, el pastor de aquel momento me dice: “Jhon creo que el Señor te está llamando al servicio, porque tienes don de gente ¡deberías prepararte!” Fue así como inicié el proceso de formación doctrinal, que pensé tardaría más, nunca creí que podría ser pastor de una comunidad y pues, me veía más como misionero. La vocación del servicio sacerdotal, me parecía el llamado de Jesús.
En diciembre de ese mismo año, el pastor se retiró a otro país y sorpresivamente el obispo me convocó, aunque yo no me consideraba la persona más formada, tenía el corazón y la mente dispuesta para asumir este reto.
A.T.: ¿En algún momento dudaste sobre tu fe, a raíz de tu orientación sexual?
J.B.: Claro, porque a nosotros nos han enseñado que una persona LGBTI es incompatible con la práctica cristiana. Así me pasó cuando hice parte de otra iglesia cristiana, yo crecí en el mormonismo y así me lo hicieron saber, me fui alejando y buscando otras espiritualidades, pero ninguna era abiertamente inclusiva. En el año 2015 conocí a la Iglesia Metodista, la cual es abiertamente afirmativa de la población LGBTI, me permitió reconocer la presencia de Dios en mí y ahí, comienzo todo mi proceso de deconstrucción de los imaginarios y paradigmas que tenía. Por eso, afirmo que Dios nos quiere siendo LGBTI.
A.T.: ¿Cómo conciliaste el activismo y tu rol sacerdotal?
J.B.: Para mí fue muy fácil. Yo venía trabajando con la población LGBTI, antes de conocer la Iglesia Metodista. Cuando dejé el mormonismo, en esa búsqueda espiritual encontré grupos desde el catolicismo, pero no desde la ala cristiana protestante. Por ello, inicié un grupo en mi casa para hablar sobre derechos humanos, cristianismo y la población sexo diversa creyente. Asumí esa vocería y luego, cuando llegué al ministerio ambas cosas se complementaron.
Porque el mensaje de Jesús es un mensaje político, un mensaje que llama a la acción, de justicia, paz, amor y reconciliación. Un llamado a la movilización y la educación; de aceptación de todo tipo de diferencias.
A.T.: En el transcurso de tu visibilidad como activista LGBTI, ¿Qué otras experiencias similares a la tuya has conocido en Colombia?
J.B.: Como activista y ministro dentro de la Iglesia Metodista he conocido otras experiencias espirituales inclusivas como la Iglesia La Puerta, que pastoreaba Luis Camilo Laborde, y hoy ya no existe. También conocí a una pareja de pastores del Ministerio Afírmanos, que era filial de la Iglesia Pentecostal, la única que sobrevive de esa época, la comunidad San Sebastián que lleva más de 20 años.
Hay nuevos grupos no oficiales de los adventistas y mormones, que se reúnen en el Centro Comunitario LGTBI de Teusaquillo. Por su parte, el padre anglicano Darío Gutiérrez ha trabajado con población trans de manera constante. Nosotros con los episcopales anglicanos tenemos en común que, somos afirmativos en responder a las necesidades espirituales de la comunidad LGBTI. A.T.: ¿Qué piensas de las recientes declaraciones del Papa Francisco, sobre la posibilidad que personas de sexo diverso formen familia? ¿Ves posibilidades de un encuentro ecuménico sobre la diversidad sexual en Colombia?
J.B.: Con respecto a las declaraciones del Papa fueron muy difusas dado que, no nombró doctrinas de la iglesia, al parecer habla de derechos civiles. No creo que sea un gran avance solo es un lenguaje más cordial hacia la población LGBTI. La sala de prensa del Vaticano ya hizo algunas aclaraciones en ese sentido, es decir, era que las personas no sean rechazadas por sus familias; porque el catecismo católico es muy claro al condenar las relaciones entre personas del mismo sexo. Pero nosotros ya hemos hecho encuentros ecuménicos en varios lugares de Bogotá, junto a varios procesos afirmativos de creyentes de la diversidad.
En Colombia, la heteronormatividad nos ha permeado tanto que, lastimosamente las mismas personas LGBT, no conciben que existan pastores o líderes espirituales sexo diversos. Tanto que, estas mismas personas, con una doble vida muchas veces, basados en el fundamentalismo nos han atacado por redes.
Dios nos da la fortaleza para trabajar este tema con educación.